vaticanes | 25/02/2012 Ayudar a escuchar la voz del Señor, abrir el camino a la vocación, ser dignos de ella mediante un comportamiento coherente con la esperanza abierta por el cristianismo. Son algunos de los temas tratados por Benedicto XVI en la "Lectio divina" con los párrocos y sacerdotes romanos, durante la que comentó un fragmento de la carta de San Pablo a los Efesios. Si desciende el número de vocaciones, sobre todo en Europa, ello sucede porque la llamada de Dios no es escuchada. Dios llama siempre, dijo el Papa, y su llamada implica la eclesialidad y el verdadero testimonio de vida de los sacerdotes, basado en la simplicidad y en la humildad, para evitar la soberbia y el egocentrismo. Al final del encuentro, se ... |